domingo, 10 de febrero de 2019

LAS NORMAS Y LAS REGLAS



Norma y regla son palabras que pueden usarse como sinónimos para referirse a las pautas, disposiciones o preceptos que debemos seguir. Sin embargo, estos términos no siempre son intercambiables.

La palabra “norma” proviene del latín y significa “escuadra”. Hace referencia a todas las pautas o lineamientos que rigen la conducta o comportamiento de una colectividad, como una empresa, una comunidad o la sociedad en general. Por tal motivo, podemos hablar de normas de higiene, normas familiares, normas escolares, etc. Las normas suponen aspectos morales, pues son ellas las que regulan las relaciones entre los individuos en una sociedad.

La regla, por su parte, es mucho más específica que la norma, y hace referencia a aspectos más concretos. Las reglas nos indican lo que está prohibido y lo que no, el modo de actuar que es admitido y el que no, la forma en que debe hacerse una cosa y la que no. En este sentido, las reglas se refieren a cuestiones más específicas de la convivencia social. Por ejemplo, las reglas del salón de clases donde se indica la hora de entrada, el que no se coma en el salón, el respetar las intervenciones de los compañeros, etc. También las reglas pueden  establecer la forma en que se debe ejecutarse alguna cosa, un procedimiento, etc. Por ejemplo: reglas para la atención al cliente.

Ya sean normas o reglas, la finalidad es regular la conducta del individuo, pero ¿por qué? ¿Con qué propósito se busca que las personas se comporten de cierto modo y no de otro? ¿Es sólo el prohibir por prohibir o el obligar por obligar? ¿Es un afán de poder de ciertos individuos la razón por la que se establecen reglas y normas determinadas? 

Una de las funciones de las normas es conseguir que exista una cohesión social que permita a las personas vivir en armonía.

Las normas son importantes en la sociedad porque controlan conductas que pueden ser destructivas para los demás y mantienen el bienestar de la población general. Cuando se convive en grupo es normal que surjan conflictos. Algunos de esos conflictos pueden dañar al grupo tanto de forma colectiva como individual. Es por esto que establecer un orden y unas pautas con las que todos estén conformes es esencial para el grupo.

Esto implica que existe la necesidad de que la conducta individual y grupal se vea regulada a favor del mantenimiento armonioso del grupo. Por tal motivo, la norma y la regla se establecen con la finalidad de buscar tanto el bien común como el individual. La comunidad no puede permitir acciones que afecten al individuo como a los demás. Por ejemplo, si en un balneario no se permite que las personas corran es para evitar que ocurra un accidente pues el suelo está resbaloso por el agua que se ha derramado de las albercas. 

Se puede hacer una clasificación sencilla de las normas en dos grandes grupos:

Normas jurídicas: son aquellas normas que aparecen en reglamentos o documentos oficiales. El incumplimiento de este tipo de normas conlleva sanciones de diversos tipos (como puede ser de tipo económico o administrativo) de tipo institucional.

Una norma jurídica podría ser por ejemplo el hecho de no robar.

Normas sociales: se consideran en este grupo aquellas que son reconocidas por un grupo social. Hace referencia por ejemplo a la moda, la tradición, las costumbres, etc. El incumplimiento de este tipo de normas no conlleva una sanción de tipo institucional, aunque si puede afectar a nivel social. El incumplimiento de una norma social puede traer consecuencias negativas para la persona tal como el rechazo o repudio del resto de la comunidad.

Una norma social podría ser por ejemplo ir bien vestido a una boda.

Las normas sociales normalmente se originan en las diversas instituciones y grupos sociales que existen. Estas instituciones y grupos son los que determinan cuál es el comportamiento adecuado.

Las normas tienen cinco características comunes:

Las normas son universales: esto quiere decir que no existe ningún grupo o sociedad en el mundo que no posea un conjunto de normas, ya que si no se dispusiera de ellas, el grupo social carecería de orden. Al igual que ningún grupo está exento de problemas y conflictos, ningún grupo puede estar exento de estar regido por normas.

Todas las normas incorporan un juicio de valor: normalmente las normas suelen estar compartidas por todos los miembros de un determinado grupo. Esto se relaciona con el hecho de que ante una situación, el comportamiento que normalmente aplicarían todos, es aquel que se espera. Además, así como se comporta cada persona, conlleva detrás un valor o juicio moral que nos dará la pauta para determinar si una acción es correcta o incorrecta.

Las normas son relativas: con este punto se hace referencia a que las características de un determinado grupo inciden sobre las normas propuestas. Pueden influir sobre las normas factores como la cultura, la edad, el rol social, el estatus o incluso la profesión.

Todas las normas no son igual de importantes: es cierto que todas las normas ayudan a que podamos vivir en una mayor armonía común, pero no todas son igual de relevantes. Solo hace falta fijarse en el ejemplo del castigo que conlleva el incumplimiento de una determinada norma respecto a otra.

Las normas son interiorizadas por los individuos: esto indica que, para un mejor cumplimiento de cualquier tipo de norma, una de las mejores formas es que las personas entiendan en su totalidad porque debe cumplirse y respetarse dicha norma. Además cuando las normas se interiorizan a lo largo del tiempo, mediante el proceso de socialización, van formando parte del individuo; consiguiendo de esa forma que el cumplimiento de las mismas se dé de forma natural.

¿Happosai sigue las normas de su comunidad?

No hay comentarios:

Publicar un comentario